Receta de espinacas con bechamel, salmón, merluza y gambas
Autor: Damián Serrano Personas: 4 Tiempo: Dificultad: Fácil
Ingredientes
- 1 kg de espinacas frescas o 750 g. de las congeladas
- 250 g. de salmón en trozos (sin piel ni espinas)
- 250 g. de merluza en trozos (sin piel ni espinas)
- 150 g. gambas crudas peladas y crudas (limpias, sin el intestino)
- 1 cebolla picada
- 2 o 3 dientes de ajo picados
- 300 ml de leche entera muy fría
- 600 ml de caldo de pescado (*)
- 50 g. de harina
- 25 g. de mantequilla
- Aceite de oliva virgen extra
- Queso parmesano rallado
- Nuez moscada
- Sal y pimienta
Elaboración
- Salpimentar el pescado y las gambas. Reservar.
- Poner a calentar el caldo de pescado y dejar que reduzca a la mitad para concentrar sabor.
- Preparar la bechamel. Calentar la mantequilla con 2 cucharadas de aceite hasta que se derrita. Añadir la harina y cocer 2 minutos para que pierda el sabor a crudo.
- Retirar del fuego, añadir la leche y mezclar enérgicamente con unas varillas para que no se formen grumos.
- Incorporar poco a poco el caldo de pescado y batir bien.
- Volver a calentar unos 10 minutos a fuego medio hasta que espese bien. Sazonar con sal, pimienta y nuez moscada.
- Calentar 2 cucharadas de aceite en una sartén grande y sofreír la cebolla hasta que esté tierna. Añadir el ajo, mezclar y luego las espinacas.
- Rehogar las espinacas hasta que hayan perdido todo su volumen y se hayan secado.
- Mezclar las espinacas con la bechamel el salmón y las gambas. Transferir a una fuente y espolvorear con parmesano.
- Hornear a 180 ºC de 20 a 25 minutos, hasta que la superficie se haya dorado al gusto. Dejar reposar fuera del horno 10 minutos.
Sugerencias, trucos y consejos
- El caldo de pescado es opcional, se puede sustituir por más cantidad de leche.
- Las gambas deben estar crudas y limpias. para quitarles el intestino puedes tirar de él con unas pinzas o hacer una incisión en el lomo de la gamba para sacarlo.
- Si usas gambas congeladas, deberás descongelarlas antes.
- Usa la combinación de pescado y marisco que prefieras. Las gambas las puedes cambiar por langostinos. La merluza por otro pescado blanco como pescadilla, bacalao fresco o congrio.
¡Hola! Me llamo Damián y, aunque de mayor siempre quise ser informático, ahora lo que realmente me apasiona es la cocina. Si estás leyendo esto, te doy la bienvenida a estoyhechouncocinillas.com. Este es mi blog personal en el que comparto todas aquellas recetas que me gustan y, sobre todo, disfruto cocinando.