¡Hola, cocinillas! Aunque no lo creas, comprar una vajilla puede ser más difícil de lo que parece. Seguramente quieres una vajilla completa, duradera, resistente y que además esté bien de precio. Así de primeras parece que elegir la vajilla adecuada no es tan fácil.
Bien sea para uso doméstico o un negocio de hostelería, es frecuente cometer errores entre la amplia variedad que existe en el mercado. Más que aconsejarte cuál es la mejor vajilla para ti, lo mejor es destacar algunas de esas equivocaciones que se cometen sin saber. ¡Comencemos!
¿Qué no debo hacer al comprar una vajilla?
Confundir porcelana, loza y arcilla
Son los tres materiales más comunes para las colecciones de vajillas. Ciertamente, para un inexperto puede ser complicado distinguir un material de otro. El problema es pagar una vajilla más cara cuando el material no lo vale.
La porcelana es muy más refinada, delicada e incluso atractiva para la vista. La loza es bastante similar aunque es más resistente y gruesa. Por su parte, la arcilla es rústica y fácil de distinguir cuando no es pulida.
Comprar muchos platos hondos y planos
Cuando se trata de vajillas completas, una de las principales limitaciones es que las piezas se adapten a tus necesidades. Generalmente, las colecciones de vajillas están constituidas por platos planos de diferentes tamaños, platos hondos, ensaladeras, entre otras piezas.
Sin embargo, cuando se trata de comprar vajillas por separado debes escoger los platos que necesites. De nada sirve comprar ocho o diez platos hondos si no se consume sopa.
Elegir platos muy grandes o pequeños
Las vajillas también representan un elemento de decoración. Varían según el estilo, la tendencia o incluso la temporada. Por ejemplo, la vajilla china generalmente tiene unas 46 piezas de tamaño medio, mientras que una japonesa puede estar constituida por platos grandes y vasijas pequeñas.
Elegir platos muy grandes para uso cotidiano puede ser un verdadero problema ya que suelen lucir extravagantes. Así mismo, las vajillas grandes con elementos decorativos suelen ser muy llamativas.
Comprar una vajilla de plata
No es un error per se, obviamente si el presupuesto te permite darte este lujo no hay problema. Sin embargo, comprar utensilios de cocina de plata pieza por pieza es contraproducente.
Una vajilla incompleta de un material u otro da muy mala imagen en caso de tener invitados. También confundir la plata con otro metal menos valioso es uno de los problemas más comunes al comprarlos.
No tener cuidado con los vasos
Muy pocas colecciones de vajillas contienen los vasos, por lo que son comprados de manera independiente. Lo ideal es guardar armonía al momento de comprar los vasos. Hay que tomar en cuenta el color, textura y tamaño de la vajilla al momento de comprar los vasos.
Analizar previamente las tendencias de lifestyle para saber cuál es el estilo adecuado para complementar la colección. Adquirir vasos sin tomar en cuenta esas cualidades hará que la vajilla pierda gran parte de su atractivo.
Escoger mal entre platos con textura o dibujo
Tanto en la porcelana como en la loza es común que los platos tengan dibujos. En caso de que la vajilla sea de mala calidad, en poco tiempo se deteriorará la pintura o el papel adhesivo.
Los platos texturizados son más caros, sin embargo, tienden a ser de excelente calidad, además de ser muy duraderos. Los platos texturizados funcionan como elementos decorativos muy llamativos.
Salirse del presupuesto
Una vajilla cara y con piezas inútiles para tus necesidades solo causará gastos innecesarios. En caso de ser una pareja que acaba de empezar a vivir juntos requerirá el dinero para otras cosas.
Las vajillas económicas abundan en cualquier tienda online. También es una excelente opción comprar los platos de manera independiente. Aquí tienes una guía de compra de vajillas completas bastante útil que no solo te ayudará a elegir las más populares, sino que también hará que ahorres dinero.
Ahora que sabes cuáles son los errores comunes al comprar una vajilla, podrás invertir de manera inteligente para tener el complemento perfecto para una cocina hermosa.
¡Hola! Me llamo Damián y, aunque de mayor siempre quise ser informático, ahora lo que realmente me apasiona es la cocina. Si estás leyendo esto, te doy la bienvenida a estoyhechouncocinillas.com. Este es mi blog personal en el que comparto todas aquellas recetas que me gustan y, sobre todo, disfruto cocinando.