
Receta de pechugas de pollo con salsa de tomate frito casero
Personas: 2 Tiempo: Dificultad: Fácil
Ingredientes
- 2 pechugas de pollo (de 150 a 200 g. cada una)
- 400 g de tomate natural o en conserva
- 1 cebolla pequeña (o 1/2 grande)
- 1 o 2 dientes de ajo
- 1 o 2 hojas de laurel
- Otras hierbas de tu elección (tomillo, romero, orégano, albahaca, hierbas provenzales…)
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- Sal y pimienta negra molida
- 1/2 cucharadita d eazúcar para corregir la acidez del tomate
Elaboración
- Lo primero de todo es decidir si quieres las pechugas con piel o sin piel. Yo, para este plato suelo dejárselas, porque, además de quedarle rico, le dan sabor a la salsa. No obstante, si lo prefieres puedes quitársela.
- Luego vamos a recortar por los bordes el exceso de grasa que tiene la pechuga, si fuera necesario. Esto se ve porque son unas tiras blancas que vienen pegadas.
- Salpimentar el pollo al gusto y dejarlo reposar.
- Pelar la cebolla y picarla muy fino.
- Picar el Pelar y picar los dientes de ajo.
- Lavar muy bien los tomates, quitarles el pedúnculo haciendo un pequeño corte alrededor y trocearlos
- Triturarlos con la batidora y luego pasarlos a través de un tamiz o colador fino en acero inoxidable para eliminar los eventuales restos de piel y semillas.
- Engrasar ligeramente una sartén y calentarla a fuego fuerte.
- Cuando esté bien caliente, dorar las pechugas de pollo por ambos lados, comenzando por el lado de la piel.
- Cuando se hayan dorado al gusto, reservarlas a parte y bajar el fuego a medio.
- Añadir a la sartén las dos cucharadas de aceite de oliva junto con la cebolla picada.
- Sofreír la cebolla a fuego medio-bajo hasta que esté bien tierna pero sin que se haya dorado. Esto puede tardar unos 10 minutos. Remover con frecuencia para que no se queme la cebolla.
- Ahora añadir el ajo, mezclar bien y dejar que se haga como un minuto o así.
- Incorporar el tomate triturado junto con la hoja de laurel y otras hierbas que le quieras echar. Salpimentar.
- Reincorporar igualmente las pechugas de pollo junto con todo el jugo que hayan podido soltar.
- Calentar y cuando rompa a hervir, bajar el fuego a fuego medio-bajo y dejar que haga chup-chup unos 20 minutos, hasta que la salsa haya reducido a la mitad. A mitad de cocción darle la vuelta a las pechugas.
- Unos minutos antes de terminar, probar la salsa y corregir de sal y pimienta. Además, si consideras que fuera necesario, añade media cucharadita de azúcar para reducir la acidez del tomate.
- ¡Y ya está! ¡Buen provecho!
Sugerencias, trucos y consejos
- Como sugerencia de presentación, puedes servir las pechugas de pollo con tomate acompañadas de un arroz blanco o una guarnición de patatas.
- Si quieres darle un toque diferente, prueba a preparar esta salsa de tomate frito con verduras, ya verás qué bien queda.
- Cuando estés dorando el pollo, hay que tener el fuego alegre y que no tarde mucho en hacerse porque queremos que luego el interior se cueza dentro de la salsa.
- Si lo prefieres, en lugar de tener las pechugas enteras, las puedes trocear en porciones del tamaño de un bocado. Esto viene bien cuando por ejemplo tienes pechugas muy grandes y usas uans 3 pechugas par a4 personas. Así es más fácil repartirlas.