
Receta de albóndigas de pollo con salsa de tomate
Autor: Damián Serrano Personas: 4 Tiempo: Dificultad: Fácil
Ingredientes
- 600 g de pechuga de pollo (*)
- 2 cucharadas de pan rallado o 2 rebanadas de pan de molde sin corteza
- 1 chorrito de leche
- 1 huevo
- 1 cebolla
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 1 diente de ajo
- Perejil fresco
- Sal y pimienta
- Aceite para freír
- Pan rallado para empanar
- 800 g de tomate en conserva
- 1 diente de ajo
- 1 o 2 hojas de laurel
- Sal y pimienta
Elaboración
- La masa para albóndigas:
- Cortar las pechugas de pollo en trocitos muy pequeños.
- Poner el pan en remojo con la leche.
- Pelar la cebolla, picarla muy fino y sofreír en una sartén con 2 cucharadas de aceite a fuego medio. Remover de vez en cuando.
- Lavar el perejil, secarlo bien y picar las hojas lo más fino posible.
- Pelar el ajo, quitarle el germen y picar fino con un cuchillo o con un exprimidor de ajos.
- En un bol, meter la carne de pollo, el pan remojado, la cebolla pochada, el ajo y el perejil. Salpimentar al gusto.
- Mezclar bien y dejar reposar tapado en la nevera al menos media hora, mejor varias horas o de un día para otro. Así se consigue que se mezclen bien los sabores.
- Cortar las pechugas de pollo en trocitos muy pequeños.
- Darle forma a las albóndigas:
- Sacar de la nevera y formar las albóndigas del tamaño de una bola de golf más o menos. Para que no se pegue la carne a las manos, humedecerlas con agua.
- Por último, las pasamos por pan rallado y las volvemos a guardar en la nevera.
- Sacar de la nevera y formar las albóndigas del tamaño de una bola de golf más o menos. Para que no se pegue la carne a las manos, humedecerlas con agua.
- La salsa de tomate:
- Pelar la cebolla y cortarla en juliana o picarla muy fino.
- Pelar el diente de ajo, quitarle el germen y picar fino (igual que antes, se puede hacer con el exprimidor de ajos).
- En una sartén, poner a calentar 2 o 3 cucharadas de aceite de oliva.
- Sofreír la cebolla a fuego medio de 5 a 7 minutos, hasta que esté tierna. Para que no se queme, remover de vez en cuando.
- Añadir el ajo, mezclar bien y rehogar un par de minutos más.
- Seguidamente, añadir el tomate triturado y reservar.
- Fritura de las albóndigas:
- Poner a calentar abundante aceite para freír, la cantidad debe ser suficiente para cubrir las albóndigas por completo. Una buena temperatura de fritura son los 170 ºC.
- Freír las albóndigas hasta que estén doradas por fuera. Hacerlo por tandas.
- Dejarlas reposar sobre papel absorbente o una rejilla para que pierdan el exceso de aceite.
- Poner a calentar abundante aceite para freír, la cantidad debe ser suficiente para cubrir las albóndigas por completo. Una buena temperatura de fritura son los 170 ºC.
- Las albóndigas en salsa:
- Y ya está. ¡Buen provecho!
Sugerencias, trucos y consejos
- Servir las albóndigas de pollo con tomate acompañadas de arroz blanco o de patatas fritas.
- (*) Para mi quedan mucho mejores si se pica con cuchillo las pechugas de pollo, pero si lo deseas no hay problema en utilizar carne de pollo picada.
- Un truco para saber si las albóndigas están bien de sal consiste en freír por separado un poco de la masa y probarlo.
- Estas albóndigas de pollo caseras son perfectas como comida de táper y llevarlas al trabajo. Quedan buenas recalentadas en el microondas.
- En el blog encontrarás más recetas de albóndigas. Aquí te dejo una receta fácil de albóndigas en salsa. Si lo prefieres, también tienes las famosas albóndigas suecas.

¡Hola! Me llamo Damián y, aunque de mayor siempre quise ser informático, ahora lo que realmente me apasiona es la cocina. Si estás leyendo esto, te doy la bienvenida a estoyhechouncocinillas.com. Este es mi blog personal en el que comparto todas aquellas recetas que me gustan y, sobre todo, disfruto cocinando.