Esta receta describe cómo preparar fácilmente un guiso de callos con garbanzos paso a paso, con un toque picante que deja un regustillo rico. Este es sin duda el guiso con garbanzos que más me gusta. Un buen plato de cuchara, algo contundente, eso sí, pero muy sabroso, que se puede tomar como plato principal acompañado de un buen vino tinto o como tapa acompañado con una cerveza, siempre con un poco de pan para mojar. ¡Huy que rico!
¿Quieres saber cómo hacer callos con garbanzos caseros?
La elaboración de los callos con garbanzos no tiene mucha complicación. Lo más importante es no olvidarse de poner en remojo los garbanzos y, también, darle un primer hervor a los callos solos.
Callos Lavados y listos para cocer (flickr.com)
El resto consiste en cocer todo junto en la olla y le vamos a poner un sofrito con un toque picante que le queda muy bien.
Aquí está la receta:
Receta de callos con garbanzos
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- 300 g de callos de ternera, bien limpios y troceados
- 250 g de garbanzos
- 150 g de panceta (en 1 sólo trozo)
- 1 chorizo asturiano
- 1 morcilla asturiana
- 1 trozo de hueso de jamón
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- 1 pimienta de Cayena
- 200 g de tomates (natural o en conserva)
- 1 cebolla grande
- 1 o 2 hojas de laurel
- 1 o 2 dientes de ajo
- 2 o 3 cucharadas de aceite de oliva
- Sal
Elaboración
- La noche anterior, pon los garbanzos en remojo en un bol cubiertos con agua fría, durante al menos unas 12 horas.
- Añade los callos en una olla grande y cúbrelos con agua fría. Lleva a ebullición a fuego fuerte.
- Pela y lava la cebolla. Córtala por la mitad y pícala finamente.
- Cuando el agua empiece a hervir déjalos unos 10 minutos. Colar y desechar el agua de cocción. Enjuaga la olla.
- Vuelve a meter los callos en la olla. Cúbrelos otra vez con agua fría junto con el laurel y la mitad de la cebolla picada.
- Pon la olla a calentar a fuego fuerte y cuando empiece a hervir, reduce a fuego medio. Retira la espuma varias veces durante la cocción.
- Cuando lleve cociendo una hora, escurre los garbanzos y añádelos.
- Por otro lado, calienta un par de cucharadas de aceite de oliva en una sartén.
- Pela y lava el diente de ajo. Pícalo finamente o machácalo.
- Cuando el aceite esté caliente, dora ligeramente el ajo e incorpora el resto de cebolla picada. Sofreír a fuego medio-bajo durante unos 5 minutos.
- Machaca la pimienta de Cayena en un mortero.
- Lavar los tomates y quitarles el pedúnculo. Cortar en trozos y triturarlos o cortar por la mitad y rallarlos.
- Cuando la cebolla esté tierna, retira del fuego y añade la Cayena y la cucharadita de pimentón. Mezcla bien.
- Vuelve a llevar la sartén al fuego y añade el tomate triturado. Deja reducir a fuego medio-bajo unos 10 minutos.
- A los 10 minutos, añade el sofrito de tomate a la olla.
- Añade también el hueso de jamón, el chorizo, la morcilla y la panceta.
- Retira el chorizo y la morcilla a la media hora y resérvalos.
- Continúa la cocción con la olla medio tapada hasta que los garbanzos estén tiernos. Puede tardar un par de horas o más, dependiendo del tipo de garbanzo. Si lo consideras necesario, añade más agua durante la cocción.
- Cuando los garbanzos estén tiernos, retira la panceta, el laurel y el hueso de jamón.
- Ajusta de sal al gusto, con cuidado porque el hueso de jamón ya habrá salado un poco el guiso.
- Trocea la panceta, el chorizo y la morcilla y mételos en la olla de nuevo. Deja cocer unos minutos más.
- Y ya está. ¡Buen provecho!
Sugerencias, trucos y consejos
- Puedes servir los callos con garbanzos enseguida o prepararlos con antelación, ya que admiten muy bien el recalentado a fuego bajo. También se puede congelar perfectamente.
- Los garbanzos hay que añadirlos con el caldo hirviendo.
- Si necesitas limpiar los callos, debes añadirle zumo de limón y un chorro de vinagre en un gran bol, llenarlo de agua fría, frotar los callos entre ellos y colar. Debes repetir todo el proceso unas 4 ó 5 veces hasta que el agua quede limpia.
- Si utilizas callos en gelatina, debes calentarlos a fuego bajo hasta que la gelatina funda. Después retira todo el líquido y ya los puedes utilizar.
- Combina los callos con garbanzos con el resto del menú ligero, para compensar el aporte en calorías del plato.
- En el blog encontrarás más recetas con garbanzos. Si quieres cambiar totalmente de registro, te recomiendo que pruebes los garbanzos con champiñones, un plato de cuchara muy rico a la vez que bastante ligero.
Ahora ya sabes cómo hacer callos con garbanzos
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Espero que te animes y te prepares un buen plato de callos con garbanzos caseros. ¡Se me está haciendo la boca agua!
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¡Hasta la próxima receta!
¡Hola! Me llamo Damián y, aunque de mayor siempre quise ser informático, ahora lo que realmente me apasiona es la cocina. Si estás leyendo esto, te doy la bienvenida a estoyhechouncocinillas.com. Este es mi blog personal en el que comparto todas aquellas recetas que me gustan y, sobre todo, disfruto cocinando.