¡Hola, cocinillas! ¿A que te gustan las croquetas de pollo caseras? ¿Que cómo lo he adivinado? Es normal… ¡Las croquetas gustan a todo el mundo! Por fin estoy listo para contarte mi receta de croquetas. Me llevó un tiempo dar con ella pero por fin, estoy contento del resultado. Tienes incluso un vídeo al final para que veas cómo quedan por dentro.
Te voy a explicar con detalle y con muchos consejos cómo hacer croquetas de una manera sencilla y muy fácil. Todos basados en mi experiencia para obtener unas croquetas de pollo fáciles de hacer y completamente a mi gusto. Desde croquetas de pollo hechas con los restos o las sobras del pollo asado hasta una explicación sobre cómo hacerlas desde el principio.
¿Quieres saber cómo hacer unas croquetas de pollo fáciles?
Para preparar unas croquetas de pollo caseras al estilo de la abuela vamos a empezar con un sofrito (también puedes hacer croquetas de pollo sin cebolla), luego con una bechamel y por último con la fritura. Hasta ahora nada nuevo, ¿verdad? Pues lee que te cuento muchos detalles.
Si bien en la bechamel para croquetas de pollo reside el secreto para que nos salgan muy cremosas, la fritura es el paso más importante para la textura crujiente. Por eso, te recomiendo que leas con atención las explicaciones sobre cómo freír las croquetas para no llevarte ninguna sorpresa.
En el blog encontrarás muchas otras ideas de recetas de croquetas deliciosas. Prueba unas sorprendentes croquetas con confit de pato buenísimas. También tienes las clásicas croquetas de bacalao o estas originales croquetas de mejillones en escabeche.
Aquí está la receta. ¡Que la disfrutes!
Receta de croquetas de pollo caseras. Cremosas y crujientes.
Nota: Hay una valoración incrustada en esta entrada, por favor, visita esta entrada para valorarla.Ingredientes
- 250 g. de pollo (el trozo que más te guste)
- 60 g. de harina de trigo
- 30 g. de mantequilla
- 30 g. de aceite de oliva virgen extra (2 cucharadas)
- 500 ml de leche entera fría de la nevera
- 250 ml de caldo de pollo (opcional)
- 1 cebolla mediana
- 1 pizca de nuez moscada
- 1 pizca de pimienta negra
- Sal
- 2 huevos
- Pan rallado o panko (pan rallado japonés)
- Aceite para freír
Elaboración
- Puedes hacer croquetas con el pollo del caldo o con los restos del pollo asado o de un guiso. En ese caso, únicamente tienes que desmigar el pollo y retirar pieles y huesos. Lo picamos para hacer trozos pequeñitos.
- Para preparar croquetas de pollo fáciles con pollo sin cocinar, lo primero que tenemos que hacer es, obviamente, cocinarlo. Lo puedes hacer a la plancha hasta que esté hecho por dentro. O lo puedes cocer 20 minutos en agua con sal. Igualmente se deshuesa y se desmiga.
- Ahora te cuento uno de mis primeros trucos. Un poco de caldo de pollo para ponerlo a la bechamel. Después, vamos a poner a calentar el caldo de pollo. Queremos reducirlo a la mitad o menos, para concentrar los sabores. En cuanto rompa a hervir, bajamos el fuego para que reduzca a fuego lento.
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Cómo hacer bechamel para croquetas de pollo.
En una sartén grande u olla, derretir la mantequilla con el aceite de oliva. Cuando esté caliente, añadir la cebolla picada y sofreír a fuego medio-bajo, hasta que esté translúcida y tierna. Incorporar el pollo desmenuzado y rehogar un par de minutos más subiendo un poco el fuego. Recuerda remover con frecuencia para que no se queme.
- Ahora, apartamos el pollo y la cebolla a un lado de la sartén (u olla) y espolvoreamos la harina. Dejamos que se cocina por un par de minutos a fuego medio para que pierda el sabor a crudo. Y luego lo mezclamos con el pollo.
- Añadimos ahora la leche que deberá estar muy fría de la nevera y removemos enérgicamente con unas varillas. Subimos un poco el fuego y, cuando la bechamel para croquetas de pollo empiece a espesar, añadimos el caldo concentrado. Cuando rompa a hervir, dejamos cocer la bechamel unos 10 minutos a fuego bajo y removiendo con frecuencia. Al final, ajustamos de sal, pimienta y nuez moscada al gusto.
- Engrasar un recipiente (mejor si es de vidrio) y transferir la bechamel en él. Pintar o engrasar la superficie con aceite o mantequilla para evitar que se reseque. Cuando esté templada, tapar y meter en la nevera de un día para otro.
- Cuando la masa haya reposado lo suficiente, formar las croquetas. A mi me gusta hacerlo con dos cucharas para darles más o menos una forma parecida. Puedes hacerlas alargadas o en forma de bolas. Mientras las vamos formando, las ponemos en un plato llano o bandeja sin que se toquen.
- Ahora las vamos a meter en el congelador de 15 a 30 minutos o dejarlas que se congelen completamente. Este paso facilita enormemente el rebozado.
- Cuando estén bien frías, una a una, las pasamos por huevo batido y luego por pan rallado. Procura que el huevo cubra toda la superficie de la croqueta y que no se quede ningún hueco sin el pan rallado.
- Una vez que las hemos formado, ponemos a calentar abundante aceite para freír en una sartén o en la freidora. Para una fritura correcta, tenemos que poner aceite suficiente para que cubran las croquetas por completo. De lo contrario corremos el riesgo de que salgan grasosas, blandas o se desparramen.
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¿Cómo freír croquetas?
Para una correcta fritura, el aceite debe estar a 170 ºC. En la freidora, cuando está a la buena temperatura, se nos indica con un testigo luminoso, pero si estamos usando la sartén tenemos dos métodos. El primero, con un termómetro de cocina, obviamente. Sin termómetro el truco está en poner un trocito de pan. Si cae al fondo y enseguida sube, el aceite ya está. Si no sube, o tarda en subir, aún le falta un poco. Por el contrario, si se queda en la superficie es que el aceite está muy caliente. Por favor, retira la sartén del fuego.
- Cuando el aceite está a temperatura correcta, vamos introduciendo las croquetas con cuidado para evitar proyecciones. En todo momento deben estar cubiertas por completo de aceite y debemos mantenerlo a la buena temperatura. En la sartén, darles la vuelta cada poco para que no se nos queme la parte en contacto con el fondo. En la freidora no es necesario.
- Es importante no sobrecargar la fritura, es decir, procurar freír las croquetas por tandas, sin llenar demasiado la sartén o freidora. Si ponemos muchas, el aceite va a descender mucho en temperatura y además, va a tardar en coger de nuevo la temperatura correcta. Esto va a provocar que las croquetas durante ese tiempo en lugar de freírse lo que hagan será chupar aceite y más aceite. El resultado, unas croquetas llenas de grasa y blandas.
- Cuando las croquetas se hayan dorado a tu gusto, sacar y poner a escurrir sobre una rejilla o reposar sobre papel absorbente para que pierdan el exceso de aceite. Repetir la fritura hasta terminar de freír las croquetas que se quieran usar o congelar el resto.
- ¡Y ya está! Ahora solo te queda esperar un poco para hincar el diente, pues estarán muy calientes. ¡Buen provecho!
Sugerencias, trucos y consejos
- No dejes nunca que el aceite llegue a humear cuando lo estás calentando. Si humea, en ese caso el aceite se degrada y se vuelve nocivo para la salud.
- Las croquetas no suelo pasarlas por harina para que quede un rebozado más ligero pero crujiente.
- El caldo de pollo es opcional. También se puede usar caldo en polvo (en ese caso no pongas sal).
- Puedes adaptar esta receta para hacer croquetas de pollo sin cebolla.
- Ajusta las cantidades dependiendo de la cantidad de pollo desmenuzado que tengas.
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¿Cómo hacer croquetas de pollo del caldo?
Muy fácil, basta con desmigar el pollo, quitarle huesos y pieles y usarlo en esta receta. Es mejor que sea un pollo que no haya cocido demasiado para que no queden insípidas.
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¿Cómo congelar croquetas?
Ponlas en el congelador en un plato llano o bandeja sin que se toquen. Déjalas un par de horas hasta que se congelen. Luego ya se pueden transferir a otro recipiente y guardarlas tapadas. Se pueden congelar o bien, antes del rebozado o después. La primera opción permite de disfrutar de un rebozado recién hecho cada vez. La segunda opción permite hacer croquetas más rápidamente.
- Para la fritura, puedes usar un aceite de oliva de sabor suave o, en su defecto, aceite de girasol.
- Ajusta la cantidad de carne a tu gusto. Quizá te parezca demasiado o quizá quieras echarle un poco más.
- Prueba el rebozado de las croquetas con panko, el pan rallado japonés. ¡Quedan aún más crujientes!
- Presta mucha atención a los consejos para la fritura.
- Queda también rico con hierbas aromáticas como perejil picado, cebollino o incluso tomillo. Lo añades cuando sazones la bechamel.
Ahora ya sabes cómo hacer croquetas de pollo caseras
¿Te ha gustado la receta? Espero que te animes a preparar estas croquetas de pollo fáciles. He intentado darte la mayor información posible para que tú también las hagas cremosas y crujientes.
Como siempre, te animo a que me cuentes qué te ha parecido esta receta aquí más abajo con un comentario. Toda crítica constructiva es bienvenida. Igualmente, déjame tus sugerencias, trucos y otros consejos que puedas tener o pregunta las dudas que te surjan. ¡Estaré encantado de ayudarte a hacer unas croquetas de pollo perfectas!
Para terminar, si eres fan de las croquetas crujientes y cremosas, te invito a que dejes tu voto de confianza al blog tan fácil como haciendo click en el botón de «me gusta» y compartiendo estas croquetas de pollo caseras al estilo de la abuela en tus redes sociales.
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¡Hasta pronto!
¡Hola! Me llamo Damián y, aunque de mayor siempre quise ser informático, ahora lo que realmente me apasiona es la cocina. Si estás leyendo esto, te doy la bienvenida a estoyhechouncocinillas.com. Este es mi blog personal en el que comparto todas aquellas recetas que me gustan y, sobre todo, disfruto cocinando.